Aquí hay un desglose:
* la inclinación de la Tierra: Nuestro planeta está inclinado en su eje a aproximadamente 23.5 grados. Esta inclinación hace que diferentes partes de la tierra reciban diferentes cantidades de luz solar durante todo el año, lo que resulta en temporadas.
* cambio de perspectiva: Mientras la tierra orbita el sol, nuestra perspectiva del cielo nocturno cambia. En verano, nos enfrentamos a un lado de la esfera celestial, revelando constelaciones que están "arriba" en esa parte del cielo. En invierno, nos enfrentamos al lado opuesto, revelando diferentes constelaciones.
* Ejemplo: Si te imaginas mirar una esfera gigante con estrellas dispersas por su superficie, a medida que la tierra gira alrededor del sol, esencialmente estamos "mirando" diferentes partes de esta esfera.
Piense en ello así: Imagina que estás parado en un campo por la noche, mirando un bosque lejano. Si camina por el campo, verá diferentes partes del bosque. Del mismo modo, como la Tierra orbita el Sol, vemos diferentes constelaciones porque estamos viendo la esfera celestial desde diferentes ángulos.
Constelaciones específicas:
* Constelaciones de verano: Estos son visibles en el hemisferio norte durante los meses de verano porque la Tierra se coloca en su órbita, donde esas constelaciones están "arriba" en el cielo nocturno. Los ejemplos incluyen Cygnus, Lyra y Sagitario.
* Constelaciones de invierno: Del mismo modo, las constelaciones de invierno como Orión, Tauro y Géminis son visibles porque la Tierra se coloca donde nos enfrentan.
Nota importante: Las constelaciones en sí no se mueven, es nuestra perspectiva la que cambia. Es como si las estrellas estuvieran atrapadas en una esfera gigante, y solo estamos mirando diferentes partes mientras orbitamos el sol.