* Mercurio: Difícil de detectar debido a su proximidad al sol, pero visible en el crepúsculo.
* Venus: El planeta más brillante, a menudo conocido como la "estrella de la mañana" o "estrella de la tarde".
* Marte: Parece rojizo y notable en el cielo nocturno.
* Júpiter: El planeta más grande, fácilmente visible y, a menudo, es una característica prominente en el cielo nocturno.
* Saturno: Un poco menos brillante que Júpiter, pero aún fácilmente visible.
Es importante tener en cuenta que si bien estos planetas eran visibles a simple vista, las civilizaciones antiguas no tenían la misma comprensión de ellos que hoy. Vieron estos cuerpos celestes como estrellas errantes, dioses u otras figuras mitológicas.