* Escala: La nave espacial es increíblemente pequeña en comparación con los planetas y su influencia gravitacional. La diferencia de tamaño es tan vasta que el gradiente gravitacional a través de la nave espacial es insignificante. Las fuerzas de marea, que surgen de las diferencias en la gravedad, son simplemente demasiado débiles para destrozar una nave espacial.
* Fuerza: La nave espacial está diseñada para ser estructuralmente fuerte, capaz de resistir tensiones y fuerzas significativas. Tienen que resistir los rigores del lanzamiento, la dureza del espacio y varias maniobras. Si bien la gravedad de un planeta ejercerá una fuerza, no es suficiente para superar la integridad estructural de una nave espacial.
* rutas orbitales: La nave espacial está diseñada para seguir caminos orbitales específicos alrededor de los planetas. Estas rutas se calculan cuidadosamente para evitar acercarse demasiado al planeta, donde las fuerzas de marea podrían volverse significativas. Los planificadores e ingenieros de la misión utilizan herramientas y simulaciones sofisticadas para garantizar la seguridad de la nave espacial.
¿Qué puede pasar con la nave espacial cerca de los planetas:
* Pull gravitacional: Si bien no es lo suficientemente fuerte como para causar la interrupción de las mareas, la gravedad de un planeta aún puede influir en la trayectoria y velocidad de una nave espacial. Así es como funcionan las asistencias gravitacionales (tiras).
* arrastre atmosférico: Si una nave espacial ingresa a la atmósfera de un planeta, experimentará fuerzas de arrastre significativas. Estas fuerzas pueden ralentizar la nave espacial o incluso hacer que se queme, dependiendo de la densidad atmosférica y el diseño de la nave espacial.
* Radiación: Algunos planetas, como Júpiter, tienen fuertes campos magnéticos y cinturones de radiación intensos. La nave espacial que pasa por estas regiones puede exponerse a la radiación nociva, lo que puede dañar sus electrónicos e instrumentos.
En resumen:
Mientras que los planetas ejercen un tirón gravitacional significativo, la nave espacial es demasiado pequeña y demasiado estructuralmente sólida para ser interrumpida de marea. Sin embargo, aún pueden verse afectados por otras fuerzas como la resistencia atmosférica, la radiación e influencia gravitacional en sus trayectorias.