He aquí por qué:
* Los planetas tienen temperaturas diferentes: Los planetas tienen diferentes temperaturas basadas en factores como su distancia del sol, la composición atmosférica y la actividad geológica.
* Las temperaturas de la superficie no son consistentes: Incluso en un solo planeta, las temperaturas de la superficie pueden variar significativamente dependiendo de la ubicación, la hora del día y la temporada.
Venus es el planeta más popular de nuestro sistema solar, con una temperatura de superficie promedio de alrededor de 867 grados Fahrenheit (464 grados Celsius). Sin embargo, esto es solo un promedio, y las temperaturas pueden fluctuar.
Es importante recordar que incluso los planetas extremadamente calientes como Venus no mantienen una temperatura única y consistente en toda su superficie.