Los hallazgos del estudio sugieren que el tiempo de viaje puede no ser tan improductivo como a menudo se piensa. De hecho, el tiempo de viaje puede brindar una oportunidad para que las personas participen en actividades para las que de otro modo no tendrían tiempo. Por ejemplo, las personas que viajan en automóvil pueden usar su tiempo de viaje para ponerse al día con el trabajo, escuchar un podcast o hacer una llamada telefónica. Las personas que viajan en transporte público pueden utilizar su tiempo de viaje para leer, observar a la gente pasar o simplemente relajarse.
Los hallazgos del estudio también tienen implicaciones para la política de transporte. Por ejemplo, los hallazgos sugieren que los planificadores del transporte deberían considerar el potencial de las personas para participar en actividades productivas al diseñar nuevos sistemas de transporte. Esto podría incluir proporcionar asientos más cómodos, mejor iluminación y Wi-Fi más confiable en el transporte público.
Los hallazgos del estudio son un recordatorio de que el tiempo de viaje no siempre es tiempo perdido. De hecho, el tiempo de viaje puede brindar una oportunidad para que las personas participen en actividades que sean a la vez productivas y placenteras.