1. Amplia área de búsqueda: El área de búsqueda del MH370 era increíblemente grande y abarcaba millones de kilómetros cuadrados en el Océano Índico. Con un área tan extensa que cubrir, los satélites por sí solos fueron insuficientes para determinar la ubicación exacta del avión.
2. Resolución limitada: Los satélites tienen una resolución limitada, lo que significa que es posible que no puedan capturar imágenes detalladas de objetos pequeños en la superficie del océano. Esto dificultó la identificación de escombros o restos específicos relacionados con el avión.
3. Condiciones Oceánicas: La zona de búsqueda se caracterizó por mares agitados, olas altas y fuertes corrientes, lo que complicó aún más los esfuerzos para localizar el avión. Las imágenes satelitales pueden verse afectadas por estas condiciones, lo que dificulta la obtención de imágenes claras y útiles.
4. Falta de desechos específicos: A pesar de una extensa búsqueda por satélite y otros medios, no se han encontrado restos o restos significativos del MH370. Sin evidencia física, a los satélites les resulta difícil determinar la ubicación precisa del avión.
5. Limitaciones de tiempo: La búsqueda del MH370 era urgente, ya que la duración de la batería de las balizas de localización del avión era limitada. Se desplegaron satélites como parte del esfuerzo de búsqueda, pero la inmensidad del área y la falta de desechos específicos obstaculizaron su efectividad.
Es importante señalar que los satélites seguían siendo activos valiosos en la operación de búsqueda. Proporcionaron información valiosa, como posibles rutas de vuelo, datos oceanográficos y patrones climáticos, que ayudaron a limitar el área de búsqueda. Sin embargo, debido a los desafíos mencionados anteriormente, no pudieron determinar la ubicación exacta del avión desaparecido.