La lluvia es un fenómeno natural provocado por la condensación del vapor de agua en la atmósfera, y no tiene un ritmo ni patrón específico. Si bien la lluvia puede usarse como fuente de inspiración para la música, no es una característica ni un ritmo definitorio de la música pop.
La música pop, por otro lado, es un género caracterizado por diversos elementos musicales, como melodías pegadizas, armonías simples, ritmos repetitivos y letras que se centran en temas y emociones con los que nos podemos relacionar. El ritmo de la música pop suele ser constante, bailable y diseñado para atraer a una amplia audiencia.
Entonces, si bien la música pop puede incorporar diferentes sonidos, ritmos e influencias de diversas fuentes, no tiene inherentemente un ritmo de lluvia.