Según una nueva investigación, el asteroide 16 Psyche, que alguna vez se pensó que era el núcleo metálico de un planeta primitivo, puede ser un montón de escombros unidos por la gravedad.
Los hallazgos, publicados en la revista Nature Astronomy, podrían tener implicaciones para nuestra comprensión de cómo se forman los planetas.
"Solíamos pensar que Psyche era el núcleo expuesto de un protoplaneta que era aproximadamente del tamaño de Marte", dijo la autora principal, la Dra. Tracy Becker, científica investigadora del Southwest Research Institute en Boulder, Colorado. "Pero nuestros nuevos datos sugieren que es más probable que se trate de una pila de escombros que nunca pudo fusionarse completamente en un planeta".
Psyche tiene aproximadamente 340 kilómetros (210 millas) de diámetro y orbita alrededor del Sol entre Marte y Júpiter. Es uno de los objetos más masivos del cinturón de asteroides y se cree que es el remanente de un protoplaneta que fue interrumpido temprano en la historia del sistema solar.
Los científicos llevan décadas estudiando Psyche, pero no han podido obtener una idea clara de su composición. Algunos estudios han sugerido que está hecho de metal, mientras que otros han sugerido que está hecho de roca.
La nueva investigación, que utilizó datos del Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) en Chile, proporciona pruebas sólidas de que Psyche no está hecho de metal.
"Los datos de ALMA muestran que Psyche no emite ninguna radiación térmica", dijo Becker. "Esto significa que no es un buen conductor del calor, lo que concuerda con que se trate de un montón de escombros".
Los hallazgos tienen implicaciones para nuestra comprensión de cómo se forman los planetas. Los científicos creen que los planetas se forman cuando pequeños trozos de roca y polvo chocan y se pegan. Con el tiempo, estas piezas crecen cada vez más hasta que eventualmente forman planetas.
Sin embargo, la nueva investigación sugiere que no todos los planetas se forman de esta manera. Es posible que algunos planetas, como Psyche, nunca puedan fusionarse completamente en un solo objeto.
"Nuestros hallazgos sugieren que puede haber más escombros en el cinturón de asteroides de lo que pensábamos", dijo Becker. "Esto podría tener implicaciones para nuestra comprensión de cómo se formó el sistema solar".