1. Chorros y salidas protoestelares :Las protoestrellas a menudo impulsan potentes chorros y chorros a lo largo de sus ejes de rotación. Estos flujos de salida son flujos colimados de gas y polvo impulsados por la conservación del momento angular y la presión de radiación de la protoestrella. Pueden transportar cantidades significativas de material de la región de formación estelar y desempeñar un papel crucial en la configuración del entorno circundante.
2. Salidas bipolares :En muchos casos, los chorros protoestelares exhiben una estructura bipolar, con dos lóbulos dirigidos de manera opuesta. Estos flujos bipolares son el resultado de la interacción entre la protoestrella en rotación y el disco de gas y polvo que la rodea. Los flujos de salida limpian una cavidad alrededor de la protoestrella, lo que puede ayudar a regular una mayor caída de material e influir en la masa final de la estrella.
3. Vientos Estelares :A medida que las estrellas jóvenes alcanzan la fase de secuencia principal de su evolución, desarrollan fuertes vientos estelares impulsados por las altas temperaturas y luminosidades de su superficie. Estos vientos se llevan masa y momento angular de la estrella y desempeñan un papel importante en la configuración de las capas superficiales de la estrella e influyen en su velocidad de rotación.
Es importante señalar que no todas las regiones de formación estelar exhiben vientos fuertes. La naturaleza y fuerza de estos vientos dependen de varios factores, incluida la masa y la etapa evolutiva de la protoestrella, la densidad y estructura del entorno circundante y la presencia de campos magnéticos. Sin embargo, los vientos desempeñan un papel crucial en la configuración de la región de formación estelar y en la regulación de la evolución posterior de la estrella en formación.