Las fuentes puntuales débiles podrían contribuir a la GCE emitiendo rayos gamma a través de diversos procesos, tales como:
Sistemas binarios: Algunos sistemas estelares binarios, particularmente aquellos que contienen estrellas de neutrones o agujeros negros, pueden producir rayos gamma mediante procesos como la acreción o los chorros. Si hay una población significativa de estos sistemas binarios en el centro galáctico, podrían contribuir a la GCE observada.
Vientos estelares: Las estrellas masivas pueden emitir rayos gamma como parte de su viento estelar, que es un poderoso flujo de partículas desde las capas exteriores de la estrella. Si hay una gran cantidad de estrellas masivas en el centro galáctico, su contribución combinada de los vientos estelares podría ser notable como parte del GCE.
Restos de supernova: Las supernovas son poderosas explosiones que ocurren cuando las estrellas masivas llegan al final de sus vidas. Los restos de supernovas pueden seguir emitiendo rayos gamma durante miles o incluso millones de años después de la explosión. Si ha habido supernovas recientes en el centro galáctico, sus remanentes podrían estar contribuyendo al GCE.
Sin embargo, es importante señalar que si bien las fuentes puntuales débiles podrían contribuir a la CME, probablemente no expliquen completamente el exceso observado. También se cree que factores adicionales, como la presencia de un agujero negro supermasivo en el centro galáctico y las complejas interacciones dentro del denso entorno estelar, desempeñan un papel importante en la producción del GCE.
Se necesitan más observaciones y estudios, incluidos estudios detallados de la región del centro galáctico con telescopios sensibles a los rayos gamma, para comprender mejor la naturaleza y el origen del GCE y desentrañar las contribuciones de diversas fuentes, incluidas las fuentes puntuales tenues.