El Niño
- Durante El Niño, el Océano Pacífico tropical oriental se vuelve inusualmente cálido, mientras que el Pacífico occidental se vuelve más frío. Este calentamiento del Pacífico oriental puede provocar cambios en los patrones de viento, lo que provocará cambios en las precipitaciones y la temperatura en todo el mundo.
- Los fenómenos de El Niño suelen durar de 9 a 12 meses, pero a veces pueden persistir hasta 18 meses. Ocurren cada 3 a 7 años, pero no existe un patrón regular en su sincronización.
Efectos de El Niño:
- Sequías en algunas regiones y aumento de precipitaciones e inundaciones en otras.
- Cambios en el nivel del mar, afectando a los ecosistemas marinos.
- Variaciones en las corrientes oceánicas, que influyen en la migración y reproducción de los peces.
- Cambios en los patrones climáticos, incluido el aumento de la frecuencia e intensidad de las tormentas.
La Niña
- La Niña es la fase opuesta de El Niño, caracterizada por temperaturas superficiales del mar inusualmente frías en el Océano Pacífico tropical oriental y aguas más cálidas en el Pacífico occidental.
- Los fenómenos de La Niña tienden a ser más prolongados que los de El Niño:duran de 9 a 12 meses, pero a veces persisten hasta 24 meses.
Efectos de La Niña:
- Sequías en zonas que suelen recibir precipitaciones importantes durante la fase de El Niño.
- Aumento de las precipitaciones e inundaciones en otras partes del mundo.
- Cambios en las corrientes oceánicas y reducción de las poblaciones de peces en algunas regiones.
- Patrones climáticos cambiantes, como temperaturas más frías y mayor actividad de tormentas.
Tanto El Niño como La Niña tienen importantes impactos sociales, económicos y ambientales. Afectan a la agricultura, la gestión de los recursos hídricos, la pesca y los ecosistemas a nivel mundial. Comprender y monitorear estos patrones climáticos es crucial para el pronóstico del tiempo, la preparación para desastres y las estrategias de adaptación al clima.