Se cree que los anillos se formaron a partir de los restos de una luna que fue destrozada por la gravedad de Saturno. Con el tiempo, los restos de la luna se extendieron formando un disco plano alrededor del planeta. Las partículas de los anillos chocan constantemente entre sí, lo que ayuda a mantenerlas en su lugar.
Los anillos de Saturno son una característica compleja y hermosa de nuestro sistema solar. Son un recordatorio de las fuerzas violentas que dieron forma a los planetas y lunas que orbitan alrededor de nuestro sol.