Una supernova comienza cuando una estrella masiva, al menos ocho veces la masa del Sol, llega al final de su vida. En este punto, el núcleo de la estrella está formado por hierro, que ya no es capaz de fusionarse y producir energía. Como resultado, el núcleo colapsa bajo su propia gravedad.
2. Formación de una estrella de neutrones
A medida que el núcleo colapsa, se vuelve increíblemente denso. Los electrones y protones del núcleo se comprimen entre sí formando neutrones. Esto crea una estrella de neutrones, que es extremadamente pequeña y densa. La estrella de neutrones tiene una masa aproximadamente igual a la del Sol, pero sólo mide unos 10 kilómetros (6 millas) de diámetro.
3. Liberación de energía
El colapso del núcleo libera una enorme cantidad de energía, lo que provoca la explosión de la estrella. La explosión es tan poderosa que eclipsa a toda una galaxia. La luz de una supernova se puede ver desde la Tierra incluso durante el día.
4. Remanente de supernova
Después de la explosión, los restos de la estrella forman un remanente de supernova. Este remanente está formado por gas, polvo y elementos pesados. Los elementos pesados se crean en el núcleo de la estrella durante la supernova. Los restos de supernovas suelen ser estructuras hermosas y complejas. Se pueden ver en una variedad de colores, incluidos rojo, azul y verde.
5. Impacto en la Tierra
Las supernovas tienen un impacto significativo en la Tierra. Los restos de una supernova pueden viajar por el espacio y llegar a la Tierra. Estos desechos pueden contener radiación dañina que puede dañar los organismos vivos. Las supernovas también pueden provocar cambios climáticos al alterar la atmósfera terrestre.
Sin embargo, las supernovas también son importantes para la Tierra. Crean los elementos pesados que son necesarios para la vida y ayudan a mantener el universo en equilibrio.