Los agujeros negros, por definición, no parpadean. Las estrellas parecen titilar debido a la atmósfera de la Tierra, lo que hace que su luz se distorsione. Los agujeros negros, por otro lado, son regiones del espacio donde la gravedad es tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar. Como resultado, son completamente oscuros y no pueden parpadear.