El lanzamiento de la Luna 1 de la Unión Soviética el 2 de enero de 1959 marcó el primer paso en un viaje de décadas que finalmente desbloquearía algunos de los secretos del satélite de la Tierra. En los años posteriores al sobrevuelo lunar de la sonda rusa no tripulada, los descubrimientos hechos por otras misiones desafiaron las ideas tradicionales sobre la luna y su formación y pueden ayudar a allanar el camino hacia futuras misiones lunares e incluso colonias permanentes.
The Genesis Rock < Uno de los primeros grandes descubrimientos en la luna fue la "Genesis Rock". Los astronautas del Apollo 15 entrenaron para buscar muestras inusuales de minerales en la luna, con el objetivo final de descubrir una parte de la corteza primordial original de la luna. . Al principio, los astronautas pensaron que esta muestra representaba su santo grial, pero el examen detallado de la roca resultó decepcionante. El Genesis Rock resultó ser un mineral más común llamado anortosita, que data de principios de la historia de la luna pero no del todo su origen. Las misiones posteriores encontraron muestras aún más antiguas, pero el Genesis Rock todavía era significativo debido a su tamaño y composición, lo que permitió a los geólogos observar las condiciones que existían en el sistema solar menos de 100 millones de años después de su creación.
Orange Suelo
Durante las extensas exploraciones lunares del Apolo 17, el astronauta y científico Harrison Schmitt descubrió una anomalía en contra de la superficie gris uniforme y polvorienta de la luna. Al principio, pensó que un reflejo de su equipo estaba causando una decoloración en el polvo, pero pronto se dio cuenta de que había descubierto un parche de tierra naranja. La muestra que tomó contenía vidrio volcánico anaranjado, revelando evidencia de actividad volcánica en el pasado distante de la luna.
Cavernas profundas
Más evidencia de la historia volcánica de la luna llegó en 2010. La Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial había lanzado un satélite diseñado para estudiar la luna en 2007, y realizó un estudio de dos años de la superficie. Un estudio de los datos recopilados reveló la primera evidencia confirmada de tubos de lava en la corteza lunar. Los científicos habían teorizado que las cavernas formadas por la lava estaban presentes debajo de la superficie, pero este estudio representó la primera evidencia concreta de una de estas cuevas. Las futuras misiones lunares podrían usar estas cuevas como refugio, o los astronautas podrían teóricamente desarrollarlas en bases permanentes de operación.
Agua
Uno de los descubrimientos más importantes en la Luna ocurrió en 2009. LCROSS de la NASA sonda investigó los cráteres de la luna durante más de tres años, y una vez que llegó al final de su vida operativa, la agencia estrelló la sonda en la superficie. El impacto en el cráter Cabeus en el polo sur lunar reveló algo que los científicos habían sospechado por mucho tiempo, la presencia de una cantidad significativa de hielo de agua. Debido a que el agua es una parte integral del soporte vital, la generación de energía y los sistemas de propulsión, su presencia sugiere que las misiones futuras podrían aprovechar este recurso en la búsqueda de una presencia más permanente en la Luna.