Los coágulos de sangre son una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo. Pueden ocurrir en las arterias, bloqueando el flujo de sangre al corazón, el cerebro o los pulmones, o en las venas, causando hinchazón y dolor. Los tratamientos actuales para los coágulos sanguíneos son limitados y pueden ser riesgosos.
Un nuevo estudio publicado en la revista *Nature Communications* proporciona la primera evidencia directa de cómo se pueden utilizar las microburbujas para disolver coágulos de sangre. Las microburbujas son pequeñas burbujas de gas, generalmente hechas de aire u oxígeno, que se utilizan como agentes de contraste en imágenes médicas.
El estudio fue realizado por un equipo de investigadores de la Universidad de Washington. Utilizaron fotografías de alta velocidad para capturar el momento en que las microburbujas chocan con los coágulos de sangre. Los investigadores descubrieron que las microburbujas hacían que los coágulos de sangre se rompieran y se disolvieran.
Los investigadores creen que este hallazgo podría conducir a nuevos tratamientos para los coágulos sanguíneos. Las microburbujas podrían usarse para administrar medicamentos directamente a los coágulos de sangre, o podrían usarse para romper los coágulos de sangre sin necesidad de cirugía.
"Este es un gran avance en nuestra comprensión de cómo las microburbujas interactúan con los coágulos de sangre", afirmó el autor principal del estudio, el Dr. Zhen Xu. "Esperamos que este hallazgo conduzca a nuevos tratamientos que puedan salvar vidas y mejorar la calidad de vida de las personas con coágulos sanguíneos".
Cómo las microburbujas disuelven los coágulos de sangre
Las microburbujas disuelven los coágulos de sangre mediante un proceso llamado cavitación. La cavitación ocurre cuando las burbujas de gas colapsan, creando una onda de choque. La onda de choque puede romper los enlaces entre las células que forman el coágulo de sangre.
Los investigadores descubrieron que las microburbujas eran más efectivas para disolver los coágulos de sangre cuando eran pequeñas, entre 1 y 10 micrómetros de diámetro. Las microburbujas también fueron más efectivas cuando se inyectaron en los coágulos de sangre a altas velocidades.
Posibles aplicaciones de las microburbujas para el tratamiento de coágulos de sangre
Los investigadores creen que las microburbujas podrían usarse para tratar una variedad de coágulos sanguíneos, incluidos los coágulos arteriales y venosos. Las microburbujas se pueden administrar a los coágulos de sangre mediante una variedad de métodos, que incluyen inyección, ultrasonido o imágenes por resonancia magnética (MRI).
Las microburbujas también podrían usarse para administrar medicamentos directamente a los coágulos de sangre. Esto podría mejorar la eficacia de los medicamentos al dirigirlos directamente al sitio del coágulo de sangre.
Actualmente, los investigadores están realizando ensayos clínicos para probar la seguridad y eficacia de las microburbujas para tratar los coágulos sanguíneos. Esperan que algún día las microburbujas sean un tratamiento estándar para los coágulos de sangre, salvando vidas y mejorando la calidad de vida de las personas con coágulos de sangre.