La presencia de un ciberpatógeno en el iPhone de un extremista es una cuestión de especulación y no puede responderse definitivamente basándose únicamente en la información proporcionada. Los ciberpatógenos, a menudo denominados malware o software malicioso, pueden infectar varios dispositivos electrónicos, incluidos los teléfonos inteligentes, pero no se puede asumir su existencia en un dispositivo en particular sin evidencia específica o información creíble.