Durante un episodio de La Niña, los vientos alisios soplan más fuertes de lo normal, empujando agua cálida desde el Pacífico occidental hacia el Pacífico oriental. Esto hace que el agua en el Pacífico oriental se vuelva más fría de lo normal. Luego, el agua más fría libera calor a la atmósfera, lo que provoca cambios en los patrones climáticos en todo el mundo.
Uno de los impactos más significativos de La Niña es que puede provocar temperaturas más frías que el promedio en los Estados Unidos, especialmente en invierno. La Niña también puede causar más lluvias en el sur de Estados Unidos y condiciones más secas que el promedio en el noroeste del Pacífico.
A nivel mundial, La Niña puede provocar cambios en el nivel del mar, las corrientes oceánicas y los patrones de precipitación. También puede afectar la producción agrícola, los recursos hídricos y la demanda de energía.
El actual episodio de La Niña comenzó en septiembre de 2020 y se espera que dure hasta la primavera de 2022. Es uno de los episodios de La Niña más fuertes de las últimas décadas.
Es probable que el fuerte episodio de La Niña tenga varios impactos en todo el mundo, entre ellos:
* Temperaturas más frías que el promedio en Estados Unidos, especialmente en invierno.
* Más precipitaciones en el sur de Estados Unidos y condiciones más secas que el promedio en el noroeste del Pacífico.
* Cambios en el nivel del mar, las corrientes oceánicas y los patrones de precipitación en todo el mundo.
* Impactos en la producción agrícola, los recursos hídricos y la demanda de energía.
El fuerte episodio de La Niña es un recordatorio de la variabilidad natural del sistema climático. Es importante comprender los impactos potenciales de La Niña para que podamos estar preparados para los cambios que puede traer.