La exposición al sol hace que la piel produzca melanina. La melanina es el pigmento que le da color a la piel. Cuando estás expuesto a la luz solar, tu piel produce más melanina para protegerse de los rayos ultravioleta del sol. Esta es la razón por la que tu piel se oscurece después de haber estado al sol.
La cantidad de melanina que produce tu piel depende de varios factores, entre ellos:
* Tu genética. Algunas personas tienen más probabilidades de producir melanina que otras.
* La intensidad de la luz solar. Cuanto más fuerte sea la luz del sol, más melanina producirá tu piel.
* El tiempo que estás expuesto a la luz solar. Cuanto más tiempo esté expuesto a la luz solar, más melanina producirá su piel.
El bronceado puede ser perjudicial para la piel. La radiación ultravioleta del sol puede dañar el ADN de la piel, lo que puede provocar cáncer de piel. La exposición al sol también puede provocar arrugas, manchas de la edad y otros problemas de la piel.
Hay varias cosas que puedes hacer para proteger tu piel del sol, entre ellas:
* Buscar sombra. Evite pasar largos períodos de tiempo al sol, especialmente durante las horas pico de 10 a. m. a 4 p. m.
* Usar protector solar. Aplique protector solar en toda la piel expuesta, incluso en días nublados. Elija un protector solar con un SPF de amplio espectro de 30 o más.
* Reaplicar protector solar cada dos horas. El protector solar puede desaparecer, así que asegúrese de volver a aplicarlo cada dos horas o con más frecuencia si está nadando o sudando.
* Usa gafas de sol y sombrero. Las gafas de sol pueden proteger sus ojos de la radiación ultravioleta y un sombrero puede ayudar a proteger su cuero cabelludo y su rostro.
* Evite las camas solares. Las camas de bronceado emiten radiación ultravioleta, que puede dañar la piel y aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Los autobronceadores actúan interactuando con los aminoácidos de la piel para producir un pigmento llamado melanina. Este proceso es similar a la forma en que la piel produce melanina cuando se expone a la luz solar. Sin embargo, los autobronceadores no contienen radiación ultravioleta, por lo que no presentan los mismos riesgos para la piel que la exposición al sol.
Los autobronceadores vienen en una variedad de formas, incluidas lociones, cremas, geles y aerosoles. Algunos autobronceadores también están disponibles en toallitas o toallitas. Para utilizar un autobronceador, simplemente aplícalo sobre tu piel y frótalo hasta que se absorba.
Los autobronceadores pueden tardar algunas horas en desarrollar su efecto completo. Los resultados variarán dependiendo de tu tipo de piel y del producto que utilices. Algunos autobronceadores también pueden hacer que su piel luzca anaranjada o rayada. Si esto le preocupa, puede probar el producto en una pequeña zona de su piel antes de aplicarlo en todo el cuerpo.
Los autobronceadores pueden ser una excelente manera de broncearse sin exponerse al sol. Sin embargo, es importante utilizarlos correctamente para evitar posibles problemas.