Se dice que el arca, tal como se describe en la Biblia, medía 300 codos de largo, 50 codos de ancho y 30 codos de alto. Esto haría que el arca tuviera aproximadamente 133 metros de largo, 22 metros de ancho y 13 metros de alto. Si bien esto puede parecer un recipiente grande, es importante recordar que Noé recibió instrucciones de llevar dos animales de cada tipo al arca, así como suficiente comida para sustentarlos a todos durante el diluvio. Esto requeriría una enorme cantidad de espacio y es poco probable que el arca hubiera podido albergar a todos los animales de una manera cómoda y humana.
2. Falta de comida y agua:
La Biblia dice que Noé debía llevar suficiente comida al arca para sustentarse a sí mismo, a su familia y a todos los animales durante un período de un año. Esto requeriría una gran cantidad de alimentos, y es poco probable que el arca pudiera haber almacenado suficientes alimentos para durar un período de tiempo tan largo. Además, el arca habría necesitado una gran cantidad de agua dulce para sustentar a los animales, y no está claro de dónde habría venido esta agua.
3. Falta de ventilación:
El arca habría sido un ambiente muy poblado e insalubre, con cientos o incluso miles de animales viviendo muy cerca. Esto habría dificultado el mantenimiento de una ventilación adecuada y podría haber provocado la propagación de enfermedades.
4. Falta de protección frente a los elementos:
El arca no habría podido resistir las poderosas tormentas e inundaciones que ocurrieron durante el Gran Diluvio. La estructura de madera del arca habría sido vulnerable a daños y los animales en su interior habrían corrido riesgo de ahogarse o resultar heridos.
5. Falta de evidencia científica:
No existe evidencia científica que respalde la existencia del arca de Noé ni del Gran Diluvio. Los estudios geológicos y paleontológicos han demostrado que la Tierra no ha experimentado una inundación global en el pasado reciente, y no hay evidencia que sugiera que los animales en la Tierra alguna vez hayan sido aniquilados de esa manera.
6. Evidencia geológica
El registro geológico no respalda la idea de que alguna vez hubo una inundación global que destruyó toda la vida en la Tierra. Hay evidencia de inundaciones locales, pero nada de la magnitud de la descrita en la Biblia.
En resumen, hay muchas razones por las que el relato bíblico del arca de Noé no es viable como acontecimiento histórico. La falta de espacio, la falta de comida y agua, la falta de ventilación, la falta de protección contra los elementos y la falta de evidencia científica hacen imposible que el arca de Noé haya funcionado como se describe en la Biblia.