1. Gravedad: Esta es la fuerza más obvia, ya que tira del cohete hacia la tierra. El cohete debe generar suficiente empuje para contrarrestar esta fuerza y acelerar hacia arriba.
2. Resistencia del aire: A medida que el cohete se mueve a través de la atmósfera, encuentra fricción desde el aire. Esta fuerza, también conocida como arrastre, se opone al movimiento del cohete y la ralentiza.
Para superar estas fuerzas, los motores del cohete necesitan producir una fuerza mayor que la fuerza combinada de gravedad y resistencia al aire. Es por eso que los cohetes están diseñados con motores potentes que pueden generar un empuje masivo.
Aquí hay un desglose de cómo funcionan estas fuerzas:
* Gravedad: Esta fuerza es constante, tirando del cohete hacia abajo con una fuerza proporcional a su masa.
* Resistencia del aire: Esta fuerza aumenta con la velocidad del cohete y la densidad del aire. Es más fuerte en las altitudes más bajas donde el aire es más denso.
A medida que el cohete asciende, la fuerza de resistencia al aire disminuye gradualmente a medida que el aire se vuelve más delgado. Sin embargo, la gravedad permanece constante, y el cohete necesita continuar produciendo suficiente empuje para superarlo y alcanzar su altitud deseada.