* forma: Los sólidos tienen una forma definitiva, lo que significa que mantienen su forma independientemente de su contenedor. Los líquidos toman la forma de su recipiente.
* Volumen: Los sólidos tienen un volumen fijo, mientras que los líquidos pueden cambiar ligeramente el volumen dependiendo de la presión o la temperatura.
* Compresibilidad: Los sólidos son muy difíciles de comprimir, mientras que los líquidos son ligeramente compresibles.
* flujo: Los líquidos pueden fluir y cambiar su forma fácilmente, mientras que los sólidos no pueden.
Aquí hay una manera simple de pensarlo:
* sólido: Imagina un bloque de hielo. Tiene una forma definida y no cambia fácilmente.
* líquido: Imagina agua en un vaso. Toma la forma del vidrio y fluye libremente.
Por supuesto, hay algunas excepciones y casos especiales:
* líquidos viscosos: Algunos líquidos, como la miel, son muy gruesos y no fluyen tan fácilmente, lo que hace que parezcan casi sólidos.
* sólidos amorfos: Estos sólidos, como el vidrio, no tienen una estructura cristalina definida y pueden fluir muy lentamente con el tiempo.
Pero en general, las diferencias entre sólidos y líquidos son bastante claras y fáciles de observar.