1. Posición inicial:
- Párese erguido con los pies separados a la altura de las caderas y los brazos relajados a los costados.
- Mantener una buena postura y la columna recta durante todo el movimiento.
2. Movimiento del brazo:
- Doble los codos para que los antebrazos queden paralelos al suelo.
- Comienza con las manos colocadas frente a ti, una encima de la otra.
- Gira las muñecas para que las palmas queden enfrentadas.
- Empieza a dibujar un patrón en forma de ocho en el aire con las manos.
3. Patrón en forma de ocho:
- Mueve las manos con un movimiento suave y continuo.
- El primer bucle se crea moviendo la mano inferior sobre y alrededor de la mano superior.
- El segundo bucle se crea moviendo la mano superior sobre y alrededor de la mano inferior.
- El camino trazado debe parecerse a la forma del número 8.
4. Dirección y enfoque:
- Inicialmente, concéntrate en crear el patrón de la figura de ocho delante de tu cuerpo.
- A medida que se sienta más cómodo, experimente moviendo las manos en diferentes direcciones, como hacia los lados, sobre la cabeza o detrás de la espalda.
5. Mantener la alineación:
- Asegúrese de que las articulaciones de la muñeca, el codo y el hombro permanezcan alineadas durante todo el movimiento.
- Mantén los hombros relajados y evita encorvar la espalda.
6. Velocidad controlada:
- Comience lentamente y aumente gradualmente la velocidad de los movimientos de la mano.
- Mantener transiciones suaves y fluidas entre los bucles.
7. Variaciones y beneficios:
- Para desafiar su equilibrio, intente realizar el movimiento en forma de ocho mientras está parado sobre una pierna.
- A medida que vayas adquiriendo competencia, intenta dibujar figuras de ochos más pequeñas o más grandes.
8. Relajación y Respiración:
- Presta atención a tu respiración mientras realizas el movimiento en forma de ocho.
- Inhala durante un bucle y exhala durante el siguiente.
- Esto ayuda a sincronizar el movimiento con la respiración y favorece la relajación.
El movimiento en forma de ocho promueve la flexibilidad en las muñecas, los codos, los hombros y la parte superior de la espalda, al tiempo que mejora la coordinación, la concentración y la conciencia espacial. Puede ser particularmente beneficioso para mejorar el rango de movimiento de las articulaciones, reducir la tensión muscular y mejorar el control del movimiento. Sin embargo, es importante empezar poco a poco y progresar gradualmente para evitar molestias o esfuerzos excesivos.