A medida que los objetos se alejan, la fuerza gravitacional entre ellos disminuye. Esto se debe a que la fuerza de gravedad es inversamente proporcional al cuadrado de la distancia entre los objetos. En otras palabras, si la distancia entre dos objetos se duplica, la fuerza de gravedad entre ellos disminuirá a un cuarto de su valor original.
En resumen, cuanto más separados están dos objetos, más débil se vuelve la fuerza gravitacional.