En otras palabras, cuando dos ondas se encuentran, la onda resultante tendrá una amplitud que es la suma de las amplitudes de las ondas individuales. La frecuencia y longitud de onda de la onda resultante serán las mismas que las de las ondas originales.
Si las dos perturbaciones tienen la misma amplitud y están en fase, interferirán constructivamente, dando como resultado una perturbación con el doble de amplitud que las perturbaciones individuales.
Si las dos perturbaciones tienen la misma amplitud pero están desfasadas 180 grados, interferirán destructivamente, dando como resultado una perturbación con amplitud cero.
Si las dos perturbaciones tienen amplitudes diferentes y están desfasadas, la perturbación resultante tendrá una amplitud situada en algún punto entre las amplitudes de las perturbaciones individuales.
La naturaleza exacta de la perturbación resultante dependerá de los detalles específicos de las dos perturbaciones, como sus amplitudes, frecuencias y longitudes de onda.