En superposición, un electrón puede existir en múltiples estados cuánticos o funciones de onda simultáneamente. Cada función de onda representa una posible ubicación del electrón, pero hasta que se mide el electrón, no tiene una posición definida. Cuando se realiza una medición, el electrón colapsa en un solo estado, dándole una ubicación definida.
El concepto de superposición es fundamental para la mecánica cuántica. Ayuda a explicar muchos de los comportamientos extraños observados en el mundo cuántico, como la dualidad onda-partícula, los túneles y el entrelazamiento cuántico.
Si bien la superposición puede parecer contradictoria, está respaldada por numerosos experimentos. Uno de los experimentos más famosos que demuestra la superposición es el experimento de la doble rendija, que muestra que los electrones pueden interferir consigo mismos, como si fueran ondas.
Otro experimento que apoya la superposición es el experimento de Stern-Gerlach, que muestra que los electrones pueden tener múltiples valores para su espín, aunque el espín se considere una propiedad binaria.
La superposición es un concepto fundamental en la mecánica cuántica y es esencial para comprender el comportamiento de las partículas subatómicas. Si bien la superposición puede parecer extraña, está respaldada por numerosos experimentos y es una parte clave de nuestra comprensión del mundo cuántico.