La refracción de la luz es la flexión de la luz, o el cambio en la dirección de los rayos a medida que se mueve más allá de un límite. Por ejemplo, cuando la luz atraviesa una ventana, se refracta y puede crear un arcoiris. Un prisma ilustra esta teoría. A medida que la luz pasa a través del prisma, se refracta y se separa en un espectro completo, o arcoíris, de luz. La introducción de este concepto a los preescolares se puede hacer experimentando con prismas o mediante un proyecto simple usando un vaso de agua y un papel blanco.
Busque un lugar en su clase donde el sol brilla directamente a través de una ventana. Reúna a todos los niños en este lugar soleado y analice cómo los rayos del sol están brillando a través de la ventana. Dígales que va a agregar otro límite para que la luz brille, lo que hará que la luz se doble en siete colores diferentes.
Haga que un niño llene el vaso hasta la mitad con el agua.
Coloque el vaso de agua en la línea directa de la luz solar y el pedazo de papel blanco en el piso donde finalmente terminan los rayos.
Muestre a los niños que la luz que brilla a través del vaso de agua se ha refractado y separados en siete colores diferentes del espectro, o un arco iris. Para ayudar a los niños a recordar este experimento, pídales que dibujen los pasos que tomó para crear el arco iris o refractar la luz.