Los sensores de presión son como suenan: dispositivos utilizados para medir la presión. Se pueden usar para medir el flujo de líquido, el peso o la fuerza ejercida por un objeto sobre otro, la presión atmosférica o cualquier otra cosa que implique fuerza. Un sensor de presión puede ser tan simple como una balanza de resorte, que hace girar una flecha cuando se le aplica presión. Muchos sensores de presión modernos son mucho más sensibles que las básculas y proporcionan una salida precisa que se puede medir electrónicamente.
Acerca de la piezoresistividad
Los materiales piezoresistentes son materiales que cambian la resistencia al flujo de corriente cuando están comprimidos o tensos. El metal es piezorresistivo hasta cierto punto, pero la mayoría de los sensores de presión usan el silicio semiconductor. Cuando se aplica fuerza sobre el silicio, se vuelve más resistente a una corriente que atraviesa. Esta resistencia es generalmente muy lineal: el doble de presión da como resultado un cambio de resistencia dos veces mayor.
Cómo funcionan los sensores de presión piezorresistivos
Un sensor de presión piezorresistivo contiene varias obleas delgadas de silicio incrustadas entre las superficies protectoras. La superficie generalmente está conectada a un puente de Wheatstone, un dispositivo para detectar pequeñas diferencias de resistencia. El puente de Wheatstone ejecuta una pequeña cantidad de corriente a través del sensor. Cuando la resistencia cambia, pasa menos corriente a través del sensor de presión. El puente de Wheatstone detecta este cambio e informa un cambio en la presión.