1. Alto coste: El programa del Transbordador Espacial era extremadamente costoso de operar. Cada lanzamiento costó cientos de millones de dólares y el programa requirió una gran infraestructura de personal e instalaciones.
2. Preocupaciones de seguridad: El transbordador espacial tuvo una tasa relativamente alta de accidentes y muertes. Dos transbordadores espaciales, el Challenger y el Columbia, fueron destruidos en accidentes en los que murieron todos los miembros de su tripulación. Estos accidentes, junto con otros incidentes cercanos, generaron preocupaciones sobre la seguridad del programa Shuttle.
3. Limitaciones técnicas: El transbordador espacial tenía capacidades limitadas en comparación con otros cohetes. Sólo podía transportar una carga útil relativamente pequeña y no estaba diseñado para viajar más allá de la órbita terrestre.
4. Avances tecnológicos: Han surgido tecnologías más nuevas que ofrecen alternativas más baratas, seguras y capaces al transbordador espacial. Estas tecnologías incluyen cohetes reutilizables, como el Falcon 9 de SpaceX, y cápsulas tripuladas comerciales, como el Starliner de Boeing y el Crew Dragon de SpaceX.
El retiro del programa del Transbordador Espacial representa un cambio significativo en la forma en que Estados Unidos lleva a cabo la exploración espacial. Estados Unidos depende ahora de empresas comerciales para proporcionar servicios de transporte a la órbita terrestre baja. Se espera que este cambio dé como resultado menores costos, mayor seguridad y mayor innovación en la industria espacial.
Aquí hay algunos detalles sobre lo que sigue para la exploración espacial:
* Transporte de tripulación comercial: Empresas privadas, como SpaceX y Boeing, están desarrollando vehículos tripulados comerciales que transportarán astronautas hacia y desde la Estación Espacial Internacional. Se espera que estos vehículos estén operativos en 2020.
* Exploración del espacio profundo: Estados Unidos, junto con socios internacionales, planea enviar astronautas de regreso a la Luna y eventualmente a Marte. Se espera que la primera misión tripulada a Marte se lance en la década de 2030.
* Turismo espacial: Las empresas privadas también planean ofrecer vuelos de turismo espacial. Estos vuelos permitirían a los civiles experimentar la emoción de los viajes espaciales.
El futuro de la exploración espacial es brillante. Estados Unidos, junto con socios internacionales y empresas privadas, está planeando ambiciosas misiones que nos llevarán a nuevos mundos y ampliarán nuestra comprensión del universo.