Pesticidas Se utilizan para matar plagas que pueden dañar los cultivos, pero también pueden contaminar las fuentes de agua si no se utilizan adecuadamente. Los pesticidas pueden llegar a ríos y lagos, donde pueden matar peces y otras formas de vida acuática. También pueden filtrarse a las aguas subterráneas, donde pueden contaminar los suministros de agua potable.
Fertilizantes Se utilizan para proporcionar nutrientes a los cultivos, pero también pueden contribuir a la contaminación del agua. Los fertilizantes pueden escurrirse a las fuentes de agua, donde pueden provocar la proliferación de algas. La proliferación de algas puede impedir que la luz solar llegue a las plantas, lo que puede provocar su muerte. Los fertilizantes también pueden filtrarse a las aguas subterráneas, donde pueden contaminar los suministros de agua potable.
El uso de pesticidas y fertilizantes se puede gestionar para minimizar sus impactos en la conservación del agua. Algunas formas de hacer esto incluyen:
* Usar pesticidas y fertilizantes sólo cuando sean necesarios.
* Usar pesticidas y fertilizantes en las cantidades correctas.
* Aplicar pesticidas y fertilizantes de forma que se minimice su escurrimiento y lixiviación.
* Utilizar técnicas de manejo integrado de plagas (MIP) para reducir la necesidad de pesticidas.
* Utilizar técnicas de agricultura orgánica para eliminar la necesidad de pesticidas y fertilizantes.
Al tomar estas medidas, los agricultores pueden ayudar a proteger los recursos hídricos y conservar el agua.