1. Visión y bioluminiscencia:Muchos depredadores marinos poseen una excelente visión, lo que les permite detectar presas visualmente en mar abierto. Algunos depredadores, como el atún y el pez espada, tienen ojos especializados que mejoran su capacidad de ver en condiciones de poca luz. Además, ciertos depredadores pueden detectar señales bioluminiscentes emitidas por organismos presa. Muchas criaturas de las profundidades marinas utilizan la bioluminiscencia para atraer parejas o comunicarse entre sí, y los depredadores se han adaptado para explotar este fenómeno para encontrar a sus presas.
2. Olfato y quimiorrecepción:los depredadores marinos tienen un sentido del olfato y una quimiorrecepción bien desarrollados, que utilizan para detectar señales químicas en el agua. Estas señales pueden indicar la presencia de una presa, incluso cuando la presa no es visible. Se sabe que los tiburones, por ejemplo, tienen fosas nasales muy sensibles y pueden detectar concentraciones mínimas de sangre u otras sustancias químicas liberadas por sus presas heridas.
3. Señales acústicas:algunos depredadores marinos utilizan su oído para detectar los sonidos producidos por sus presas. Los delfines y las marsopas, por ejemplo, utilizan la ecolocalización para emitir clics de alta frecuencia que rebotan en los objetos y regresan a sus oídos, lo que les permite crear una imagen mental de su entorno y localizar a sus presas. Las ballenas dentadas, como los cachalotes, también utilizan la ecolocalización para encontrar calamares gigantes y otras presas de aguas profundas.
4. Seguimiento de corrientes y frentes:los depredadores marinos a menudo dependen de su conocimiento de las corrientes y frentes oceánicos para encontrar puntos críticos de alimento. Las corrientes y los frentes son áreas donde se encuentran diferentes masas de agua, creando zonas de convergencia que concentran plancton y otros organismos de presa. Los depredadores, como las aves marinas y los atunes, aprenden a asociar estas áreas con una alta densidad de presas y las buscan activamente durante sus viajes de alimentación.
5. Seguir aves y mamíferos marinos:Muchos depredadores siguen a aves y mamíferos marinos que se alimentan de las mismas especies de presas. Las aves marinas, en particular, suelen ser expertas en localizar bancos de peces u otras concentraciones de presas desde el aire. Al seguir a estos animales, los depredadores pueden aumentar sus posibilidades de encontrar abundantes fuentes de alimento de manera eficiente.
6. Aprendizaje y memoria:Los depredadores marinos tienen notables capacidades de aprendizaje y pueden recordar la ubicación de zonas productivas de alimentación. Pueden aprender de sus propias experiencias u observar a otros depredadores y adoptar estrategias de búsqueda de alimento exitosas. Por ejemplo, algunos tiburones pueden recordar la ubicación de montes submarinos o cañones submarinos donde encontraron presas en el pasado.
Estas son sólo algunas de las estrategias empleadas por los depredadores marinos para encontrar puntos críticos de alimentación en los desiertos de mar abierto. Al combinar sus adaptaciones sensoriales, señales de comportamiento y conciencia ambiental, estos depredadores navegan por las vastas extensiones del océano y localizan las áreas donde pueden cazar y alimentarse con éxito.