2. Ampliar el acceso al crédito para pequeñas empresas y agricultores. Esto ayudará a las personas a mantener sus negocios en funcionamiento y evitar perder sus medios de vida.
3. Invertir en sistemas de salud públicos. Esto ayudará a prevenir la propagación de la COVID-19 y otras enfermedades, y reducirá el riesgo de pobreza para quienes enferman.
4. Promover el trabajo remoto y las modalidades de trabajo flexible. Esto ayudará a que las personas sigan trabajando incluso si no pueden ir a su lugar de trabajo.
5. Invierta en infraestructura digital. Esto ayudará a las personas a acceder a educación, atención médica y otros servicios esenciales en línea.
6. Apoyar la economía informal. Esto ayudará a que las personas que trabajan en la economía informal, como vendedores ambulantes y jornaleros, puedan seguir ganándose la vida.
7. Promover la educación y el desarrollo de habilidades. Esto ayudará a las personas a mejorar sus perspectivas laborales y ganar salarios más altos en el futuro.
8. Apoyar a los grupos más vulnerables, incluidos mujeres, niños y ancianos. Estos grupos suelen verse afectados de manera desproporcionada por la pobreza y son más vulnerables a los impactos de la COVID-19.
9. Proporcionar apoyo de salud mental. La pandemia de COVID-19 ha causado importantes problemas de salud mental a muchas personas, lo que puede dificultarles salir de la pobreza.
10. Promover la cooperación y la solidaridad internacional. Esto ayudará a garantizar que todos los países tengan los recursos que necesitan para responder a la pandemia y reducir la pobreza.