1. Datos históricos del terremoto:
* Magnitud y ubicación: Estos datos son cruciales para identificar ocurrencias de terremotos pasados a lo largo de la falla.
* Intervalos de recurrencia: El análisis de la frecuencia de los terremotos pasados proporciona información sobre el tiempo promedio entre los eventos, lo que permite a los científicos identificar posibles brechas en la actividad.
2. Datos geológicos:
* Geometría y longitud de falla: Comprender el tamaño y la forma de la falla ayuda a identificar áreas potenciales con estrés acumulado.
* Tasa de deslizamiento de falla: Estos datos indican la tasa a la que se mueve la falla, que puede usarse para estimar el potencial de futuros terremotos.
* segmentación de fallas: La falla puede dividirse en segmentos, algunos de los cuales pueden ser más propensos a los terremotos que otros.
3. Datos geofísicos:
* Medidas GPS: Estas medidas ayudan a rastrear el movimiento de la corteza terrestre, lo que indica áreas de acumulación de estrés a lo largo de la falla.
* Datos geodéticos: Los datos de varias técnicas geodéticas como InSar (radar de apertura sintética interferométrica) pueden revelar la deformación del suelo y la acumulación de tensión, lo que sugiere posibles áreas de riesgo sísmico.
* Patrones de sismicidad: Analizar la distribución espacial y temporal de pequeños terremotos (pestores) puede indicar áreas de mayor acumulación de estrés.
4. Datos paleoseísmicos:
* trincheras y citas: Excavar trincheras a través de la zona de falla para analizar las capas sedimentarias puede revelar evidencia de terremotos pasados y su momento.
* datación por radiocarbono: Este método ayuda a determinar la edad de los terremotos pasados, proporcionando información sobre sus intervalos de recurrencia.
5. Modelado y simulación:
* Modelos de acumulación de estrés: Usando los datos recopilados, los científicos pueden crear simulaciones por computadora para modelar la acumulación de estrés a lo largo de la falla e identificar las brechas potenciales.
* Evaluación probabilística de riesgos sísmicos: Esto implica combinar todos los datos para estimar la probabilidad de futuros terremotos en diferentes áreas a lo largo de la falla.
Al integrar todas estas fuentes de datos, los científicos pueden crear una imagen completa de la historia del terremoto a lo largo de una falla. Esta información les permite identificar brechas sísmicas, que son áreas donde los terremotos están atrasados y, por lo tanto, se consideran en alto riesgo de eventos futuros.