Aquí hay un desglose:
* Temperatura: La astenosfera es significativamente más caliente que la litosfera sobre ella. Este calor, generado por el núcleo de la Tierra, hace que las rocas se vuelvan parcialmente fundidas, creando un estado viscoso y semisólido.
* Presión: La inmensa presión en la astenosfera, creada por el peso de las rocas suprayacentes, también contribuye al comportamiento de las rocas. Si bien la presión normalmente haría que las rocas se solidifiquen, el calor contrarresta este efecto, lo que resulta en un estado menos rígido.
* Composición: Mientras que la astenosfera está compuesta principalmente de peridotita, una roca densa rica en magnesio y hierro, también contiene trazas de agua y otros volátiles. Estos volátiles reducen el punto de fusión de la roca, contribuyendo aún más a su estado semi-molesto.
Diferencias clave en el comportamiento:
* Ductilidad: Las rocas en la astenosfera son dúctiles, lo que significa que pueden deformarse bajo presión sin romperse. En contraste, las rocas en la litosfera son frágiles y tienden a fracturarse. Esta diferencia permite que la astenosfera fluya y se mueva, a diferencia de la litosfera rígida.
* Convección: La naturaleza dúctil de la astenosfera permite que se formen corrientes de convección dentro de él. Estas corrientes son impulsadas por el calor del núcleo de la Tierra y resultan en el lento movimiento de la astenosfera, que a su vez impulsa la tectónica de placas.
En resumen:
La combinación de altas temperaturas, presión y contenido volátil dentro de la astenosfera crea un estado semi-molesto y dúctil, lo que le permite fluir y comportarse de una manera fundamentalmente diferente en comparación con la litosfera rígida anterior. Este comportamiento es crucial para los procesos de la tectónica de placas y la dinámica general de la Tierra.