Fuerzas naturales:
* viento: El viento puede transportar sedimentos finos como arena, limo y polvo, especialmente en desiertos y áreas costeras.
* agua: Los ríos, arroyos, olas y corrientes oceánicas pueden transportar sedimentos de diferentes tamaños, desde pequeños granos hasta rocas.
* Ice: Los glaciares pueden mover cantidades masivas de sedimento, molerlo y llevarlo largas distancias.
* Gravedad: La gravedad juega un papel en deslizamientos de tierra y caídas de rocas, moviendo sedimentos cuesta abajo.
Actividades humanas:
* Construcción: Las actividades de construcción pueden perturbar el suelo y liberar sedimentos en vías fluviales.
* Agricultura: Las prácticas agrícolas como la labranza pueden aflojar el suelo y conducir a la erosión.
* minería: Las operaciones mineras pueden exponer grandes cantidades de sedimentos a la erosión.
* Transporte: Los vehículos pueden levantar el polvo y los escombros, contribuyendo al transporte de sedimentos.
El agente específico que recoge sedimentos depende del tamaño y el tipo de sedimento, la ubicación y las condiciones climáticas prevalecientes.