Precámbrico temprano (Hadean y Archean Eons):
* caliente y hostil: La tierra todavía estaba formando, y la superficie era increíblemente caliente, probablemente fundida en algunos lugares. Los volcanes estallaron constantemente, arrojando gases y lava.
* sin continentes: Los continentes tal como los conocemos no existían. En cambio, probablemente había pequeñas masas de tierra, tal vez islas volcánicas o fragmentos de corteza continental.
* Océanos tempranos: A medida que la tierra se enfriaba, el vapor de agua se condensó en vastas océanos primordiales. Es probable que estos océanos fueran mucho más cálidos que hoy y posiblemente ácidos debido a la actividad volcánica.
* Formas de primera vida: Si bien la tierra todavía era increíblemente dura, surgieron los primeros signos de vida en estos primeros océanos, probables organismos unicelulares.
Precámbrico tardío (Proézoo Eon):
* Los continentes comienzan a formarse: Con el tiempo, la actividad volcánica y la tectónica de placas condujeron a la formación gradual de masas de tierra continentales más grandes. Estos aún no estaban fijados en sus posiciones actuales, sino que se desplazaron lentamente en todo el mundo.
* Los océanos evolucionan: Los océanos continuaron formando y desarrollándose. La vida se volvió más diversa, incluida la aparición de bacterias fotosintéticas que comenzaron a producir oxígeno.
* Primera vida multicelular: Hacia el final del precámbrico, aparecieron los primeros organismos multicelulares, lo que condujo al desarrollo de plantas y animales tempranos.
Diferencias clave de hoy:
* Sin montañas: Las cadenas montañosas que vemos hoy se formaron mucho más tarde, durante la era paleozoica.
* No hay masas de tierra reconocibles: Los continentes se dispersaron de manera diferente, y sus formas eran muy diferentes de hoy.
* menos oxígeno: La atmósfera tenía muy poco oxígeno. El oxígeno que respiramos hoy fue un producto de las antiguas bacterias fotosintéticas.
Visualización del precámbrico:
Es difícil visualizar un mundo tan diferente del nuestro, pero imagine un planeta cubierto de vastas océanos con islas volcánicas dispersas. La atmósfera sería nebulosa y llena de gases, y la vida sería increíblemente simple y primitiva. Fue un momento de cambio y evolución increíbles, preparando el escenario para la compleja vida que vemos hoy.