-Exceso de sal (suelo salino)
-Exceso de sodio (suelo sódico)
-Alta acidez (suelo ácido)
-Drenaje deficiente (suelo hidromórfico)
-Superficialidad
-Presencia de elementos tóxicos
La recuperación de suelos problemáticos implica técnicas que mejoran sus propiedades físicas, químicas y biológicas para hacerlos aptos para uso agrícola. Algunos métodos de recuperación comunes incluyen:
1. Recuperación de suelos salinos :Se trata de lixiviar el exceso de sales del suelo aplicando grandes cantidades de agua. El agua disuelve las sales y las aleja de la zona de las raíces.
2. Recuperación de suelos sódicos :Esto implica agregar enmiendas como yeso al suelo para reemplazar el sodio con iones de calcio, lo que mejora la estructura del suelo y reduce la alcalinidad.
3. Recuperación de suelos ácidos :Se trata de añadir enmiendas como cal o ceniza de madera al suelo para aumentar su pH.
4. Recuperación de suelos hidromórficos :Esto implica mejorar el drenaje mediante la instalación de tejas de drenaje, zanjas u otros métodos para eliminar el exceso de agua del suelo.
5. Recuperación de suelos poco profundos :Esto implica agregar tierra para aumentar la profundidad del perfil del suelo o usar técnicas especiales como la construcción de terrazas para mejorar la retención de humedad del suelo.
6. Eliminación de elementos tóxicos :Se trata de técnicas para eliminar o reducir la concentración de elementos tóxicos en el suelo, como la biorremediación o la fitorremediación.
La recuperación de suelos problemáticos es importante para aumentar la cantidad de tierra disponible para uso agrícola, mejorar el rendimiento de los cultivos y reducir los impactos ambientales.