Sí, el cedro rojo occidental ha llegado a un punto de inflexión. Los científicos de la UBC y el Servicio Forestal de la Columbia Británica predicen que el calor y la sequía provocados por el clima transformarán los rodales de cedros en todo el noroeste del Pacífico de América del Norte durante este siglo y, en última instancia, podrían eliminarlos por completo de Canadá.