Dos nuevos estudios han demostrado que la harina de roca glacial de Groenlandia puede ayudar a combatir el cambio climático. Los estudios, publicados en las revistas Nature Geoscience y Nature Climate Change, encontraron que la harina de roca puede ayudar a enfriar el planeta al reflejar la luz solar hacia el espacio.
La harina de roca es un polvo fino que se produce cuando los glaciares rozan el lecho de roca. Se compone de una variedad de minerales, incluidos cuarzo, feldespato y mica. Cuando el harina de roca está suspendida en la atmósfera, puede dispersar la luz solar, lo que puede ayudar a enfriar el planeta.
El primer estudio, dirigido por investigadores de la Universidad de Colorado Boulder, encontró que la harina de roca puede reflejar hasta un 20% de la luz solar que incide sobre ella. Esto significa que la harina de roca podría ayudar a compensar parte del calentamiento causado por los gases de efecto invernadero.
El segundo estudio, dirigido por investigadores de la Universidad de Copenhague, descubrió que la harina de roca también puede ayudar a enfriar el planeta al absorber calor. Cuando la harina de roca se deposita en la superficie del océano, puede absorber calor del agua. Esto puede ayudar a enfriar el océano, lo que a su vez puede ayudar a enfriar el planeta.
Los hallazgos de estos dos estudios sugieren que la harina de roca glacial de Groenlandia podría ser una herramienta valiosa en la lucha contra el cambio climático. La harina de roca es un material natural cuya producción es relativamente económica. También es un recurso sostenible, ya que los glaciares pueden producirlo continuamente.
Si se puede utilizar harina de roca para enfriar el planeta, podría ayudar a reducir los impactos del cambio climático y proteger el medio ambiente.