La pitón birmana es una especie no autóctona que ha invadido el ecosistema de los Everglades. Las serpientes probablemente fueron introducidas en Florida a través del comercio de mascotas y desde entonces han prosperado en el clima cálido y húmedo. Las pitones birmanas son depredadores voraces y se sabe que diezman las poblaciones de vida silvestre nativa. En 2000, la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC) estimó que había más de 100.000 pitones birmanas en los Everglades.
La caza de pitones
En 2017, la FWC lanzó el Programa de Eliminación de Pitones, una iniciativa financiada por el estado para eliminar las pitones birmanas de los Everglades. El programa paga a los cazadores de pitones con licencia 50 dólares por cada pitón que capturan y matan. Desde su inicio, el Programa de Eliminación de Pitones ha eliminado más de 10.000 pitones birmanas de los Everglades.
¿Está funcionando?
El Programa de Eliminación de Pitones ha logrado eliminar un gran número de pitones birmanas de los Everglades. Sin embargo, es difícil decir definitivamente si el programa ha sido eficaz para reducir la población general de pitones. Las poblaciones de pitones son muy difíciles de rastrear y es posible que el programa simplemente haya desplazado a las serpientes a otras áreas del estado o haya provocado un cambio en el equilibrio de los depredadores en el ecosistema con consecuencias no deseadas.
Desafíos y controversias
El Programa de Eliminación de Python también se ha enfrentado a una serie de desafíos y controversias. Un desafío es el hecho de que las pitones son hábiles para esconderse y difíciles de encontrar. Además, el programa ha sido criticado por algunos grupos defensores de los derechos de los animales, quienes argumentan que es cruel e inhumano matar animales criados en cautiverio.
El futuro del programa
La FWC se ha comprometido a continuar con el Programa de Eliminación de Pitones, y el programa se ha ampliado hasta 2023. El programa ha logrado eliminar un gran número de pitones birmanas de los Everglades, pero aún es demasiado pronto para decir si será eficaz en reduciendo la población general de pitones. La FWC continuará monitoreando la situación y hará ajustes al programa según sea necesario.