El ópalo está hecho de sílice hidratada o dióxido de silicio. Su contenido de agua varía. Los ópalos naturales vienen en dos variedades. Los ópalos comunes son de un solo color y pueden ser transparentes, blancos, rojos o negros. La otra variedad, ópalo con calidad de gema, se llama ópalo precioso. Los ópalos preciosos son conocidos por su juego de color, el arcoíris que brilla cuando se gira a la luz. Los investigadores que trabajan en la creación de ópalos en el laboratorio intentan capturar esta calidad evasiva y recrear la belleza de los ópalos preciosos naturales. En el laboratorio se crean tres categorías de ópalos: imitación, sintéticos y cultivados artificialmente.
Ópalos de imitación
El único requisito para que un material sea un ópalo de imitación exitoso es parecerse al ópalo natural. John Slocum inventó un ópalo de imitación conocido como Slocum Stone, o esencia de ópalo, en 1974. La piedra está hecha de vidrio con trozos de papel metálico que crean el fuego que es característico del ópalo. Opalite es otra imitación que está hecha de plástico. Es más suave que el ópalo natural y exhibe iridiscencia de la piel de lagarto, un patrón similar a una escama que se asemeja a la apariencia del ópalo natural, pero aún es notablemente diferente.
Ópalos sintéticos
El proceso básico de la síntesis de ópalo consta de tres etapas. Primero, los científicos crean diminutas esferas de sílice. A continuación, organizan las esferas en un patrón de celosía para imitar la estructura del ópalo precioso. Finalmente, llenan los poros de la estructura con gel de sílice y lo endurecen. El proceso puede llevar más de un año. El resultado es un producto de sílice hidratada que exhibe iridiscencia y tiene una apariencia similar a la del ópalo natural. La parte más difícil de la síntesis de ópalo es recrear el fuego del arco iris del ópalo precioso natural. Pierre Gilson creó el primer ópalo sintético en 1974, y los primeros intentos tenían bandas de iridiscencia en lugar de destellos. Los investigadores ajustaron el proceso y crearon la iridiscencia de la piel de lagarto.
Método de crecimiento del ópalo de Len Cram
En la década de 1980, el fotógrafo e historiador de ópalo Len Cram comenzó a experimentar con nuevas formas de hacer crecer ópalos. Después de escuchar historias de esqueletos opalizados y postes de cercas alrededor de minas de ópalo, Cram dudó de la explicación tradicional de la formación de ópalo. Otros plantearon la hipótesis de que la sílice llenó focos en el suelo y se endureció en ópalo durante cientos de años. Cram creía que los ópalos crecían más rápidamente. Pensó que los ópalos se formaron a partir de reacciones químicas que involucran compuestos en la tierra. Cram ha creado su propio proceso para crear ópalos basado en esta teoría. Mezcla la suciedad del ópalo con electrolitos líquidos y, en cuestión de meses, desarrolla ópalos visualmente indistinguibles de los ópalos naturales.