La actividad volcánica modela continuamente la geología de la superficie de la Tierra. Este proceso natural comienza en las profundidades de la corteza, cuando el magma supercalentado (un material de roca líquida formado por minerales y gases) se eleva hacia la superficie y entra en erupción a través de grietas o respiraderos. La roca fundida liberada durante una erupción se conoce como lava, que se enfría y cristaliza rápidamente para formar rocas ígneas. Las rocas de lava son un tipo de roca ígnea conocida como basalto, que se compone de diversos elementos minerales y químicos.
Clasificación como roca másica
La composición de una roca de lava es una función de su estructura mineral y disposición química. Un factor que determina la composición de una roca ígnea es su clasificación como roca félsica o máfica. Las rocas félsicas están dominadas por el silicio y los minerales de aluminio, mientras que las rocas máficas están dominadas por el magnesio y los minerales de hierro. Las rocas de lava, generalmente de color gris oscuro, negro o rojo, se clasifican como rocas máficas y normalmente se forman a partir de lava de flujo rápido con una velocidad de enfriamiento o solidificación rápida.
Elementos químicos
Las rocas de lava están compuestas por altas cantidades de elementos de hierro y magnesio (denominados colectivamente grupo ferromagnesiano) y calcio. Debido a su composición química, los basaltos son el tipo de roca más abundante del suelo oceánico y la corteza terrestre, y son la capa rocosa principal de las islas hawaianas. Estas rocas contienen una cantidad relativamente baja de silicio y elementos de aluminio. Los elementos ferromagnesianos en la lava y el magma tienen una velocidad de enfriamiento rápida, lo que resulta en la apariencia de grano fino de los basaltos.
Composición mineral
Una variedad de minerales contribuye a la composición de las rocas de lava. Los minerales más comunes son el feldespato de piroxina, olivino, anfíbol y plagioclasa, aunque ocasionalmente se encuentran bajas cantidades de hornblenda, mica de biotita, magnetita y cuarzo. Gabbro, una roca ígnea intrusiva máfica que se solidifica debajo de la corteza terrestre, tiene la misma composición mineral que el basalto. A altas temperaturas, los minerales máficos se enfrían y cristalizan muy rápidamente. Como resultado, algunas rocas de lava tienen una fina capa de partículas de vidrio en su superficie.
Porosidad de las rocas de lava
Las rocas de lava son muy porosas, lo que significa que hay numerosos espacios vacíos en su superficie para líquidos o gases para fluir a través. La porosidad se debe a la presencia de burbujas de gas en el flujo de lava o magma, que forman agujeros en la superficie de los basaltos durante el proceso de enfriamiento. Estos agujeros o cavidades se conocen como vesículas. Como resultado de su porosidad, los basaltos generalmente tienen una baja densidad. Su naturaleza vesicular hace que las rocas de lava tengan una apariencia esponjosa, convirtiéndolas en artículos populares para jardinería ornamental y jardines rocosos.