1. Movimiento molecular y energía:
* objetos calientes: Las moléculas en objetos calientes vibran y se mueven mucho más rápido que las de los objetos más fríos. Este aumento de movimiento se traduce en mayor energía cinética.
* objetos geniales: Las moléculas en objetos fríos tienen menor energía cinética y vibran con menos intensidad.
2. Radiación térmica:
* ondas electromagnéticas: Los objetos calientes emiten radiación electromagnética (específicamente radiación infrarroja) debido al movimiento de sus partículas cargadas. Cuanto más rápido sea el movimiento, mayor es la energía de la radiación emitida.
* intensidad: La intensidad de esta radiación (cuánto calor se irradia) es directamente proporcional a la temperatura del objeto. La temperatura más alta significa radiación más intensa.
3. Ley de Planck:
* Longitud de onda: La longitud de onda de la radiación emitida también se ve afectada por la temperatura. Los objetos más calientes emiten radiación a longitudes de onda más cortas (como la luz visible), mientras que los objetos más fríos emiten radiación a longitudes de onda más largas (como infrarrojos).
* Emisión máxima: Cada objeto tiene una longitud de onda específica en la que emite la mayor radiación. Esta longitud de onda está determinada por su temperatura.
Analogía:
Imagina una fogata. Las brasas brillantes son muy calientes y emiten mucha luz y calor visibles. Los registros más fríos a su alrededor emiten menos luz visible, pero aún radian en el calor, lo que puede sentir si se acerca.
En resumen:
Los objetos calientes irradian más calor que los objetos fríos porque sus moléculas se mueven más rápido, lo que lleva a una mayor energía cinética y la emisión de radiación electromagnética de mayor energía. La intensidad y la longitud de onda de esta radiación están directamente relacionadas con la temperatura del objeto.