1. Densidad de energía: Esto se refiere a la cantidad de energía almacenada por unidad de masa o volumen. Las fuentes de alta densidad de energía son más compactas y más fáciles de transportar.
2. Eficiencia: Esto mide cuánto de la entrada de energía se convierte en salida de energía utilizable. Las fuentes de alta eficiencia desperdician menos energía y son más rentables.
3. Impacto ambiental: Esto abarca el impacto general en el medio ambiente, incluidas las emisiones de gases de efecto invernadero, la contaminación, el uso de la tierra y el uso del agua. Las fuentes de energía sostenibles minimizan su huella ambiental.
4. Costo: El costo de extraer, transportar y usar una fuente de energía es crucial para su viabilidad económica. Las fuentes de energía rentables hacen que la energía sea asequible para consumidores e industrias.