Sin embargo, algunas figuras clave en su desarrollo incluyen:
* Julius Robert Mayer: En 1842, propuso la primera declaración clara del principio de que la energía no puede ser creada o destruida, solo transformada de una forma a otra. Basó su trabajo en observaciones del calor generado por el proceso de oxidación.
* James Prescott Joule: A través de sus experimentos sobre el equivalente mecánico del calor (1843-1849), Joule proporcionó evidencia cuantitativa para apoyar la hipótesis de Mayer. Estableció una relación numérica entre el trabajo mecánico y el calor, demostrando su equivalencia.
* Hermann von Helmholtz: En 1847, Helmholtz publicó una formulación integral del principio de conservación de la energía, que incorpora el trabajo de Mayer y Joule. Aplicó el principio a varias áreas de física, incluida la mecánica, el calor y la electricidad.
Entonces, si bien a ninguna persona puede ser acreditada por "dar" la ley de conservación de la energía, el trabajo de estos científicos, junto con otros, contribuyó significativamente a su desarrollo y aceptación.