1. Alta eficiencia: Las centrales eléctricas térmicas tienen una eficiencia relativamente alta para convertir la energía de combustible en electricidad. Las plantas modernas pueden lograr eficiencias de más del 40%, lo que significa que convierten más del 40% de la energía del combustible en electricidad utilizable.
2. Fiabilidad: Las centrales eléctricas térmicas generalmente se consideran fuentes de electricidad muy confiables. Pueden operar continuamente durante largos períodos, proporcionando un suministro constante de energía.
3. Escalabilidad: Las plantas de energía térmica se pueden construir en varios tamaños, lo que las hace adecuadas para satisfacer una amplia gama de demandas de energía. Se pueden escalar fácilmente hacia arriba o hacia abajo para que coincidan con las necesidades de una población creciente o cambie la demanda de electricidad.
4. Rentable: En muchas regiones, las plantas de energía térmica son la forma más rentable de generar electricidad. Ofrecen un costo más bajo por kilovatio-hora en comparación con otros métodos de generación de energía, particularmente para la producción de energía a gran escala.
5. Flexibilidad de combustible: Muchas centrales eléctricas térmicas pueden usar una variedad de combustibles, que incluyen carbón, gas natural, petróleo y biomasa. Esta flexibilidad les permite adaptarse a los cambios en la disponibilidad y los costos de combustible.
6. Tecnología establecida: Las centrales eléctricas térmicas han estado en uso durante más de un siglo, lo que las convierte en una tecnología bien establecida y madura. Esto significa que hay una vasta base de conocimiento y una fuerza laboral experimentada disponible para operar y mantener estas plantas.
7. Creación de empleo: Las centrales eléctricas térmicas proporcionan numerosos empleos en construcción, operación y mantenimiento, contribuyendo a la economía local.
8. Subproductos: Algunas plantas de energía térmica generan valiosos subproductos como la ceniza, que se pueden usar en la producción de cemento u otras aplicaciones industriales.
9. Estabilidad de la cuadrícula: Las centrales de energía térmica generalmente son adecuadas para proporcionar potencia de base base, que es el suministro constante de electricidad necesario para satisfacer la demanda mínima. Esto contribuye a la estabilidad y confiabilidad de la red.
10. Carga siguiente: Muchas centrales de energía térmica pueden ajustar su producción para que coincidan con la demanda cambiante, lo que ayuda a equilibrar la red eléctrica.
Es importante tener en cuenta que estas ventajas a menudo están equilibradas por los inconvenientes ambientales significativos, como las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación del aire. Es por eso que hay un enfoque creciente en fuentes de energía renovables y soluciones de energía sostenible.