* Pérdida de energía durante el metabolismo: Los organismos usan energía para realizar funciones vitales como la respiración, el movimiento y el crecimiento. Este proceso no es 100% eficiente, y se pierde algo de energía como calor.
* Consumo incompleto: Los depredadores no siempre consumen todo el organismo de la presa. Esto significa que cierta energía permanece sin usar en la cadena alimentaria.
* materia indigestible: No todos los alimentos son digeridos y absorbidos por organismos. Los productos de desecho, como las heces, contienen energía no digerida.
La regla del 10%: Una regla general común es que solo alrededor del 10% de la energía de un nivel trófico se transfiere al siguiente. Esto significa que si una planta tiene 100 unidades de energía, el herbívoro que la come solo podría obtener 10 unidades, y el carnívoro que come el herbívoro solo podría obtener 1 unidad.
Consecuencias:
* Niveles tróficos limitados: Esta pérdida de energía limita el número de niveles tróficos en una cadena alimentaria. Es muy raro encontrar más de 4 o 5 niveles tróficos en una cadena alimentaria porque la energía disponible en niveles más altos se vuelve demasiado baja para apoyar a una gran población.
* Importancia de los productores primarios: Las plantas y otros productores primarios son cruciales para capturar la energía inicial de la luz solar y comenzar la cadena alimentaria. Su papel en la captura y el almacenamiento de energía es esencial para todos los demás organismos en el ecosistema.
En conclusión, la cantidad total de energía en una cadena alimentaria disminuye a medida que fluye a través de diferentes niveles tróficos. Esta pérdida de energía es un principio fundamental de la ecología, con implicaciones significativas para la estructura y función de los ecosistemas.