La atmósfera terrestre está compuesta aproximadamente por un 78% de nitrógeno, un 21% de oxígeno y un 1% de otros gases. Las plantas producen oxígeno mediante el proceso de fotosíntesis, que convierte el dióxido de carbono y el agua en glucosa y oxígeno. El oxígeno que respiramos proviene del aire y se absorbe en el torrente sanguíneo a través de los pulmones.