Liderando el camino:
1. Dinamarca :Dinamarca es uno de los pioneros en energías renovables y ha superado sistemáticamente sus objetivos. En 2021, el país generó más del 50% de su electricidad únicamente a partir de energía eólica y aspira a alcanzar la neutralidad de carbono para 2050.
2. Suecia :Suecia tiene un compromiso de larga data con la sostenibilidad y depende en gran medida de la energía hidroeléctrica y la bioenergía. El país pretende eliminar por completo los combustibles fósiles para 2045.
3. Alemania :Alemania tiene la mayor capacidad instalada de energía renovable en Europa y ha logrado avances significativos en la eliminación gradual del carbón y la energía nuclear. Sin embargo, su avance en la expansión de las energías renovables se ha ralentizado en los últimos años.
4. Portugal :Portugal ha experimentado un rápido crecimiento en energía renovable, impulsado principalmente por la energía eólica y solar. El país aspira a alcanzar el 80% de su generación de electricidad a partir de energías renovables para 2030.
5. Finlandia :El crecimiento de las energías renovables en Finlandia se atribuye principalmente a sus abundantes recursos hidroeléctricos. El país aspira a ser neutral en carbono para 2035.
Desafíos y países rezagados:
1. Polonia :Polonia depende en gran medida del carbón para la generación de energía y se encuentra entre los países con la menor proporción de energías renovables. La transición energética del país ha sido lenta debido a factores políticos y económicos.
2. República Checa :La República Checa enfrenta desafíos similares a los de Polonia, con un sector energético dependiente del carbón y un progreso limitado en el desarrollo de energías renovables.
3. Hungría :Hungría también ha sido criticada por su lenta adopción de energías renovables, con preocupación por la dependencia del país de los combustibles fósiles y la energía nuclear.
4. Rumania :Rumania ha logrado algunos avances en materia de energía renovable, pero todavía depende en gran medida de los combustibles fósiles, en particular el carbón y el gas natural.
A pesar de los distintos grados de progreso, la tendencia general en Europa muestra un cambio hacia fuentes de energía renovables. Sin embargo, se necesitan más inversiones, apoyo político y eliminación de barreras para alcanzar los ambiciosos objetivos de energía renovable de Europa.