Las historias climáticas son narrativas plausibles e internamente consistentes sobre cómo el clima puede evolucionar en el futuro. Proporcionan una variedad de posibles resultados climáticos basados en diferentes supuestos sobre factores como las emisiones de gases de efecto invernadero, los avances tecnológicos y las respuestas sociales.
A continuación se explica cómo el uso de historias climáticas puede ayudar a las empresas a tomar decisiones frente a la incertidumbre climática:
1. Identificación de riesgos y oportunidades: Las historias climáticas ayudan a las empresas a identificar riesgos y oportunidades potenciales asociados con diferentes futuros climáticos. Al considerar una variedad de escenarios, las empresas pueden evaluar cómo sus operaciones, cadenas de suministro y mercados podrían verse afectados. Esto les permite tomar decisiones informadas sobre inversiones, desarrollo de productos y estrategias de gestión de riesgos.
2. Planificación de escenarios: Las historias climáticas sirven como base para ejercicios de planificación de escenarios, donde las empresas desarrollan estrategias y planes para diferentes futuros climáticos. Cada historia representa un conjunto diferente de supuestos, lo que permite a las empresas explorar diversos resultados potenciales y desarrollar estrategias flexibles que puedan adaptarse a circunstancias cambiantes.
3. Fomentar la resiliencia: Al comprender los impactos potenciales de los diferentes escenarios climáticos, las empresas pueden tomar medidas proactivas para generar resiliencia en sus operaciones. Esto incluye diversificar las cadenas de suministro, invertir en medidas de adaptación climática y desarrollar planes de contingencia para responder a eventos climáticos extremos u otras perturbaciones relacionadas con el clima.
4. Comunicación con las partes interesadas: Las historias sobre el clima pueden ayudar a las empresas a comunicarse eficazmente con las partes interesadas, incluidos inversores, clientes y formuladores de políticas, sobre los posibles impactos del cambio climático en sus operaciones y estrategias. Esto fomenta la transparencia y genera confianza entre las partes interesadas, mejorando su confianza en la capacidad de la empresa para afrontar los desafíos relacionados con el clima.
5. Planificación a largo plazo: Las historias climáticas permiten a las empresas pensar más allá de la toma de decisiones a corto plazo y considerar las implicaciones a largo plazo del cambio climático. Al evaluar cómo sus estrategias se alinean con diferentes escenarios climáticos, las empresas pueden tomar decisiones informadas que se alineen con sus metas a largo plazo y objetivos de sostenibilidad.
En resumen, el uso de historias climáticas proporciona a las empresas un enfoque estructurado para gestionar la incertidumbre climática y tomar decisiones informadas. Al considerar una variedad de posibles futuros climáticos, las empresas pueden identificar riesgos y oportunidades, desarrollar resiliencia, comunicarse efectivamente con las partes interesadas y planificar a largo plazo, mejorando en última instancia su adaptabilidad y competitividad en un clima cambiante.